La experiencia Cero de Oro inserta a las generaciones en la cultura del ahorro
Santo Domingo, RD. La Asociación Popular de Ahorros y Préstamos (APAP) estimula el hábito del ahorro como ejercicio de desarrollo individual y social, promoviendo los aportes que, en ese sentido, hace como institución financiera desde su iniciativa Cero de Oro, vigente desde hace 49 años.
A través de la serie de testimoniales “Transformando juntos”, APAP proyecta a los protagonistas que por la vía del ahorro logran el sueño de un techo propio y logran premios en efectivo depositados en sus cuentas que impactan en el bienestar propio y de sus familiares.
El Cero de Oro inserta a cada generación desde hace poco más de medio siglo en la cultura del ahorro, fomentando una economía más inclusiva y sostenible. Lissette Margarita y Heather Madelin Contreras, ganadoras de ediciones pasadas del Cero de Oro, son portavoces de esta experiencia y cuentan cómo su confianza en APAP las llevó materializar sus anhelos.
“El Cero de Oro es la forma en que desde APAP agradecemos a nuestros clientes la confianza depositada en nosotros para el cuidado y crecimiento de sus ahorros, y en adición premiarles y recompensar su buena costumbre del ahorro,” afirma Leandro Sebele, Director de Mercadeo de APAP.
Tan sólo desde 2010 hasta la fecha, 64 clientes han visto hecho realidad el sueño de tener su techo propio, beneficiando a la estructura familiar con la estabilidad implícita en la posesión de un activo de esa naturaleza.Â
El ahorro nacional es la suma de todas las decisiones de ahorro individuales de los agentes económicos, entre los que se incluyen hogares, empresas y organismos del sector público. El Cero de Oro, como resorte del ahorro, ha creado a lo largo de los años eslabones que forman hoy una extensa cadena de ahorrantes con impacto en la dinámica de la economía.
Las decisiones de ahorro son tomadas por individuos y reflejan la información que estos tienen y las numerosas consideraciones relacionadas con la vida real que pueden influir en su conducta. El ahorro nacional es el vehículo a través del cual un individuo puede alcanzar la estabilidad y confiar en su propio futuro.
En el documento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) “Ahorrar para Desarrollarse: cómo América Latina y el Caribe puede ahorrar más y mejor” comparte que las iniciativas de pagar transferencias sociales a través de cuentas bancarias y canalizar las remesas a través de los sistemas financieros locales son primeros pasos que resultan de utilidad para el desarrollo de una economía saludable.
Para seguir incentivando el ahorro financiero se requiere el diseño de programas que vinculen los pagos con programas que ofrecen capacitación financiera y/o con instrumentos que ayuden a los usuarios a superar los sesgos de conducta y sociales limitantes del ahorro.
La educación financiera de un individuo potencializa su productividad e integrada desde la niñez resulta más fácil inculcar los hábitos del ahorro cuando el cerebro está en pleno desarrollo y en capacidad de retener mucha información. ##