Reciben un chance y lo aprovechan al máximo
Jaclin Campos
Santo Domingo, RD
Listín Diario

 

“Viernes a las 6:23 de la tarde”. Kelvin Silverio recuerda “como hoy” el momento en que le informaron que había sido escogido como becario de Dale un Chance, programa de inversión social que la Asociación Popular de Ahorros y Préstamos (APAP) desarrolla desde el 2011.

Es que hay instantes que te cambian la vida. Y oportunidades que se deben aprovechar al máximo.

Silverio es uno de cinco beneficiarios del programa Dale un Chance que se graduaron de la universidad en febrero pasado, antes de que se declarara la pandemia por el nuevo coronavirus. Completan el grupo Nathalia Díaz, Lorendy Taveras, Diana Jiminián y Charleny Hernández. Todos obtuvieron honores.

Estos cinco jóvenes fueron solo las primicias de un año que se proyecta muy fructífero para el proyecto. A pesar de la pandemia, se prevé que en el 2020 obtengan sus títulos universitarios 19 becarios de Dale un Chance. Catorce de ellos lo harán con honores.

“Es nuestra cosecha más grande”, informa Mariely Quéliz, gerente de Inversión Social de la entidad financiera.

Con esos 19 graduados se alcanzaría un total de 46 profesionales entregados a la sociedad gracias a esta iniciativa que promueve la movilidad social a través de becas de educación superior y el primer empleo.

En Dale un Chance, jóvenes bachilleres meritorios se integran como pasantes a la APAP por un período de 12 semanas, y optan por becas universitarias completas en prestigiosas universidades del país.

Alrededor de 150 jóvenes han participado a lo largo de sus casi diez años de historia.

En ese lapso la Asociación ha invertido más de 120 millones de pesos en la educación de los estudiantes seleccionados como becarios.

Experiencia enriquecedora  

La experiencia transforma la vida de los jóvenes -adquieren nuevas capacidades y una buena educación- e impacta su entorno familiar.

Para sus mentores, guías y compañeros de labor resulta enriquecedor ver a los chicos recorrer el camino que los lleva de pasantes a profesionales.

“Lo más gratificante para mí ha sido ver su evolución, cómo se van transformando de niños a adultos, verlos graduarse, en su mayoría con altos honores, verlos conseguir empleo, ser promovidos, ganar reconocimientos, como miembros de comités importantes en sus universidades, como emprendedores, trabajar de la mano con ellos. Siento que son como mis hijos y me enorgullecen sus logros”, cuenta Quéliz.

Prácticas inclusivas

La integración de estudiantes con discapacidad al programa (participan un joven con discapacidad visual, y tres con discapacidad auditiva) fue uno de los factores tomados en cuenta este año para otorgar a la entidad financiera la categoría oro del Sello RDIncluye.

El reconocimiento, que obtiene por cuarto año consecutivo, lo otorgan el Consejo Nacional de Discapacidad (Conadis) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Opiniones

“Voy a estar eternamente agradecida no solo por haberme dado la beca, sino por haberme formado previo a entrar a la universidad en los programas, en la pasantía”.

Lorendy Taveras, graduada de Gestión Financiera y Auditoría (Magna cum laude)

“Estoy eternamente agradecida por darme la oportunidad, por darme el chance, creer en mí, y hoy estamos celebrando los frutos de esa oportunidad”.

Charleny Hernández, graduada de Derecho (Summa cum laude)

“No solamente se han enfocado en la parte educativa, sino en la parte interna. Es una institución que apoya mucho los valores y la parte humana”.

Kelvin Silverio, graduado de Gestión Financiera y Auditoría (Summa cum laude)

“Este país necesita más de este tipo de programas de inversión social, y espero que las empresas tomen este tipo de iniciativas”. Diana Jiminián, graduada de Derecho (Summa cum laude)

https://listindiario.com/la-vida/2020/08/12/630311/reciben-un-chance-y-lo-aprovechan-al-maximo